La falta de accesibilidad para personas ciegas y disminuidas visuales no es exclusividad del Estado

“Encontramos muchas motos mal estacionadas en las veredas, aires acondicionados mal colocados que pueden dañar la cabeza de una persona”, detalló al ser consultada sobre los desafíos de vivir en Resistencia para personas con este tipo de discapacidad. Como se puede ver, conductas que están más en el plano de lo individual que de lo colectivo.

Aunque claro, también mencionó otras deficiencias que tiene la ciudad, donde el Estado jugaría un papel clave y no hace mucho. “Las puertas que se abren para afuera, veredas rotas, falta de señalizaicón en la parada de colectivos y la falta de rampas para subir a los mismos. Tampoco hay escaleras acordes para que ellos puedan desplazarse de forma más autónoma”, recalcó.

También explicó los diferentes tipos de bastón. El blanco es para las personas ciegas, el blanco con punta roja es para quienes tienen además otro handicap y el bastón verde para disminuidos visuales.

ENSEÑAR A VIVIR

Libertad Digital también habló con Mabel Pérez, la bibliotecaria de la institución, una maestra con discapacidad visual y auditiva.

“Lectura en sala, audio libro, libros con letras grandes y además adaptamos libros tanto para tinta como para braille”, especificó.

Contó que leer en Braille es una práctica de mucha paciencia por el espacio físico que se necesita para tener un libro en ese lenguaje, pero además porque el tiempo de lectura por tacto es otro.

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