A ocho años de la desaparición de Elvis Benítez: “Hoy podemos llegar a la verdad”, dijo su mamá
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A ocho años de la desaparición de Elvis Benítez: “Hoy podemos llegar a la verdad”, dijo su mamá

La madre de Elvis Benítez habló del dolor intacto, la reactivación de la causa y del nieto que nunca conoció a su papá.


22/12/2025
 /  libertaddigital.com
 -  Sociedad  /  Redacción: Gabriel Bobis

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A ocho años de la desaparición de Elvis Martín Benítez, su madre, Érica Romero, volvió a ponerle voz al dolor y a la esperanza. En una entrevista con Libertad, relató cómo vive este nuevo impulso judicial que reactivó la causa y por qué, por primera vez desde aquel 22 de diciembre de 2017, siente que la verdad puede salir a la luz.

Ese día quedó marcado en mi vida para siempre”, dijo. “Lo vivo con tristeza, porque es el último recuerdo que tengo de mi hijo. Pero hoy también tengo esperanza. Es la primera vez en ocho años que siento que puede llegar a saberse qué pasó con Elvis”.

El punto de quiebre: nuevos testimonios

La reactivación de la investigación se produjo a partir de nuevos testimonios surgidos tras el impacto del caso de Cecilia Strzyzowski. En particular, los dichos públicos de Gloria Romero abrieron líneas que la fiscalía comenzó a explorar y que derivaron en allanamientos y medidas que no se habían tomado en ocho años.

“Todo surge de lo que dijo la mamá de Cecilia. A partir de ahí se reanuda todo”, explicó Érica. “Todavía está bajo investigación y yo sé muy poco, porque no quieren que hablemos demasiado para no entorpecer, pero sé que hay testigos que se acercaron a la fiscalía”.

“A mi hijo le pasó algo esa mañana”

Érica mantiene desde el primer día la misma convicción. “Yo siempre dije lo mismo: a mi hijo le pasó algo esa mañana. Si subió a un vehículo, fue porque conocía a alguien. Elvis no se iba a subir con un desconocido”, sostuvo.

El último rastro firme ubica al joven camino a la parada del colectivo 111, que debía llevarlo hasta la casa de sus abuelos. Un amigo declaró haberlo dejado allí, pero nadie lo vio subir. “Los choferes lo conocían, mis hijos viajaban siempre en ese colectivo. Esa mañana no subió”, remarcó.

Para Érica, Elvis nunca salió de Resistencia. “Por eso siempre pedí rastrillajes desde el primer día. Para mí, él estaba acá”, insistió, y cuestionó las falencias iniciales: “Sí, se hicieron muchas cosas mal. No había fiscal, la causa quedó sin rumbo”.

Un chico sociable, una vida en marcha

Elvis tenía 18 años, era muy sociable, estudiaba en colegios del centro y conocía gente de distintos barrios. “Seguía una banda de rock, tenía muchos amigos. No era un chico conflictivo”, recordó su madre.

Al momento de desaparecer, había sido papá hacía apenas tres meses. “Tenía el regalo para su bebé guardado para el 24 de diciembre”, contó, con la voz quebrada. “Un conjuntito, un osito… Yo lo entregué pensando que él iba a volver”.

El nieto, el calco del padre

El paso del tiempo dejó una imagen tan dolorosa como potente: el hijo de Elvis, hoy ya un niño, es idéntico a su papá. “Es el calco”, dijo Érica. “Un varoncito, ya un hombrecito”.

Mantiene contacto con él y no tiene impedimentos para verlo. “Para él, su papá es su abuelo paterno, con quien se crió”, explicó. Esa presencia del nieto funciona como sostén, pero también como herida abierta: “Elvis nunca pudo darle un regalo de Navidad”.

El pedido que no se apaga

Érica volvió a hacer un llamado público: “Alguien vio algo, alguien sabe algo. Si es por miedo, que hablen de manera anónima. Hay declaraciones con identidad reservada. Lo importante es que cuenten”.

Desde el Ministerio Público, el procurador adjunto Miguel Fonteina confirmó que hoy existen datos que antes no estaban y que la fiscalía trabaja para reconstruir las últimas horas de Elvis con testimonios bajo juramento. Parte de diligencias del caso Cecilia ya fueron incorporadas al expediente.

Ocho años después

Elvis salió de su casa del barrio Mujeres Argentinas aquel 22 de diciembre y nunca volvió. No tenía celular, no había cámaras y el expediente quedó empantanado durante años. Hoy, con la causa reactivada y una recompensa vigente del Sistema Federal de Búsqueda, la familia vuelve a esperar.

“Yo no busco otra cosa que saber la verdad”, dijo Érica Romero. Ocho años después, su relato vuelve a ocupar el centro de la escena judicial. Y con él, la esperanza de una madre que nunca dejó de buscar.

Mirá la entrevista completa.

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