Día Contra el Acoso Escolar: la observación y la escucha como ejes fundamentales para reconocer lo que está pasando

"Lo que se conoce como bullying es un hostigamiento entre pares que están atravesados por la misma realidad y muchas veces su cerebro funciona de la misma manera, no es uno superior a otro. Ya se vinculan, se hablan de esa manera, se acercan al otro con hostilidad que ya viene enmarcado en un adulto", comenzó explicando.

El Día Internacional Contra el Acoso Escolar o el Bullying se conmemora cada 2 de mayo con el fin de concientizar sobre los riesgos que conlleva este mecanismo, el cual afecta a uno de cada tres niños. La jornada incentiva a padres, docentes y adultos responsables a tomar una serie de conductas que ayuden a prevenir y detectar de manera temprana estas situaciones, para evitar su complejidad y daños físicos, emocionales y mentales en sus víctimas.

"El hostigamiento es una forma de evaluar o darle características a cosas que vemos sin tener el registro de cómo lo está viviendo el otro. Se incrementó en la pandemia porque ni los adultos ni los niños sabían cómo encarar y el enlentecimiento de lo pedagógico y habilitar las aulas de otra manera, fueron causales globales para que podamos entender que privarnos del contacto aumentó estas situaciones", expresó.

"Reorganizar las burbujas y las nuevas formas de contacto llevó 2 años y sigue teniendo un costo real muy grande", aseveró.

"Los adultos que pedagógicamente están tomando presencia en las aulas pueden funcionar como agentes de escucha y habla, no podemos apelar a que solo la seño o el profe estén delante de la tarea pedagógica, esto tiene que ser discursivo a diario, tenemos que tener presentes las reglas de convivencia, eso va a disminuir la visión violenta que genera este hostigamiento", afirmó.

"Seguimos sosteniendo que la escuela debe hacer algo, pero es la sociedad la que tiene que hacerse cargo, los niños son la caja de resonancia más pequeña de lo que estamos haciendo por fuera", marcó.

"Es una realidad que los docentes estamos cansados y que no se cobra lo suficiente, pero se tienen las herramientas, la observación en la escucha es un fundamento pedagógico, la práctica te la va otorgando", dijo.

"Las escuelas siguen teniendo vigente la guía, que se actualizó el año pasado, sobre orientaciones en base a situaciones que interrumpen la vida cotidiana. Hay herramientas, tenemos que afinar la mirada y la escucha tratando de que la realidad que estamos atravesando no nos opaque", opinó.

Por otra parte destacó que "la escuela tiene como eje fundamental la comprensión de la lectura, todo está atravesado por esa base. Para ser más inteligentes hay que leer más y hay que habilitar libros, textos y palabras para que puedan verbalizar lo que piensan y sienten".

"Podemos empezar por micro cuentos en micro escenarios toda la emocionalidad que traen, porque si en la casa no saben poner en palabras lo que pasa, que puedan hacerlo en la escuela o con los amigos", señaló.