Maura y Danilo, una historia de amor tano que pobló la Argentina y se plasmó en libros

"Creo que cada uno tiene un ego y yo lo tengo", sostiene Maura Rosati antes de referirse a "¡Maura!... Amor infinito", libro escrito por el brasileño Alberto de Maio y traducido por Marta Montaño, con la revisión, edición y compaginación de la escritora Dra. María de Pompert de Valenzuela.

""El amor acerca las almas""

Maura Rosati tiene 93 años es vicepresidenta de la Dante Alighieri y ex vicecónsul de Italia, su historia se hizo carne en las páginas de esta obra y lo testifica de una forma tan arraigada a su memoria, que enternece a cualquiera.

"Me encantó la forma en que escribieron sobre mi vida, sobre mi amor. Lo raro es que hay dos historias acá: una es cómo yo lo viví y otra es cómo este escritor me reubicó en el tiempo para escribir el libro", destacó Rosati.

Maura es principal protagonista de una obra que recoge su vida y más que nada su historia de amor, inmortalizándose así en un ícono literario.

"Yo fui de vacaciones a Brasil hace treinta años y conocí una familia hermosa con la que comenzamos a alternar cenas, cafés y mucho mate. Nos contábamos, naturalmente, las historias de nuestras vidas”.

Presente en estos cuentos estaba un joven, Alberto De Maio, de veinte años que escuchaba en silencio sin decir nada. He aquí que pasa el tiempo y terminan mis vacaciones por la edad que uno lleva encima y un buen día a través de Facebook me encuentro un saludo especial de Alberto que me recordaba con cariño extremo. Me preguntó si lo autorizaba a escribir sobre mi vida, naturalmente sin conocerlo le dije que sí", relató.

Maura remarcó que la historia se convirtió en un libro digital que luego se convirtió en una manifestación empírica del amor. "Sin saber yo portugués pude comprender todo el libro, me emocioné y lloré, él se emocionó más que yo, escribió lo que yo no pude decir", subrayó.

"Pienso que esa palabra 'amor infinito' hay que escribirla en el cielo y que todos levantando la vista creyéramos en el amor, porque soy una mujer que por amor estoy en Argentina, en Resistencia, me he criado en esta ciudad que amo, por amor fui vicecónsul de Italia, es decir que no es difícil", señaló.

Maura Rosati subrayó que en la vida existen distintos tipos de amores, pero todos exigen lo mismo: el pensamiento sobre el otro.

Respecto de su esposo, relató que conoció a su pareja cuando éste era supeditado a la figura de su papá como hijo de un empleado. "Él era hijo de un capataz de mi papá que tenía una empresa constructora. Cuando venía junto con su padre a hablar con el mío, se metía en la cocina a escuchar la radio, entonces me contaba y me leía poesía, así pasando los años estábamos juntos", contó.

Ya pasada la guerra, su entonces esposo anuncia su viaje a América y esto sacudió a la familia. "Éramos cuatro hermanas y todas estábamos enamoradas de él, todas queríamos ir con él porque era un poeta, un hombre de ese tiempo", indicó.

En un tironeo amoroso, Maura pudo averiguar que su entonces pretendiente, la había elegido como esposa antes de llegar a Argentina. "Mi mamá no lo quería, ella sabía que yo estaría con él", contó.

Su historia resulta de lo más pintoresca, en el marco de la conjugación de inmigrantes que poblaron el país, constituye un testimonio del romance donde la historia argentina comienza a formarse.

"Cuando llegó Danilo a la 9 de Julio con ocho manos, le gustó y se sintió a sus anchas. Después de cientos de cartas de él y mías, nos casamos por poder el 1 de diciembre de 1951 y cuando legué a Buenos Aires el 11 de marzo de 1952 al correr sobre el puente me enamoré de América, me enamoré de Argentina, allí bajé y me encontré en los brazos de Danilo para mi llegada y cumplí mi sueño de estar con Danilo", remarcó.

Libros

Maura tiene ya dos libros donde se recorre su vida: "Italianos en el Chaco" de Fabio Echarri y "La otra tierra" de María Cristina de Pompert de Valenzuela.

Este nuevo libro está ilustrado con fotos de la vida de Maura. Llegó a Argentina cuando tenía 22 años, ya casada con Danilo Petrucci, a quien conoció a los 9 años. Dejó atrás a sus padres y hermanos. En este suelo tuvieron dos hijos, Daniela y Roberto.

El 2 de febrero de 1973 llegó a Resistencia y no hablaba castellano. Trabajó en coros, clubes, asociaciones y también sucedió a su esposo en el cargo de Vicecónsul Honorario en la Provincia de Chaco, durante 5 años.

Ocupó distintos cargos en el Instituto Italiano Dante Alighieri y desde 2014 es vicepresidenta. Colabora en clases de conversación, asiste a eventos sociales y actos patrióticos, facilita acercamientos con otras instituciones y personalidades amigas, participa de reuniones de comisión de forma presencial o a través de internet.

Escribió un libro para su esposo llamado "Predestinado", quien falleció en 2012. Estuvieron juntos durante 61 años y siempre se escribieron cartas y poemas.