Denuncian irregularidades en licitaciones del Ejecutivo municipal

“Lo que estamos denunciando no es un delito penal —todavía, al menos— sino una posible mala administración de los recursos públicos”, aclaró Romero al aire de Radio Libertad.

Desde el inicio de la gestión del intendente Roy Nikisch, el concejal Bolatti detectó una fuerte contradicción entre el discurso oficial y las decisiones administrativas tomadas, especialmente entre diciembre de 2023 y los primeros meses de 2024.

“Como concejal, y sobre todo desde la oposición, tiene la obligación de controlar cómo se están utilizando los recursos municipales”, remarcó Romero.

Falta de información pública y control dificultado

Romero cuestionó que el municipio no publica en tiempo y forma la información presupuestaria ni las contrataciones.

“No se puede hacer un control de oficio si la información no está disponible. Cuando finalmente se publican licitaciones en el Boletín Oficial —todas el mismo día— ya es tarde: lo único que se puede hacer es una denuncia posterior”, explicó.

Además, señaló diferencias llamativas entre los alquileres de camiones y la realidad operativa en la ciudad.

“Se licitaron 138 camiones, supuestamente en uso 24 horas, pero no los ves circular. Y mientras tanto, los barrios están llenos de residuos acumulados”, advirtió.

Otro de los puntos más graves señalados por Bolatti es la contratación de alquileres por $9.400 millones, en lugar de adquirir vehículos propios.

“Por ese monto se podrían haber comprado 62 equipos o 56 camiones compactadores. Es decir, se optó por una solución que no solo es más cara, sino que no deja bienes a la Municipalidad”, señaló Romero.

Servicios deteriorados y ausencia de campañas

Romero también hizo hincapié en la falta de servicios básicos: recolección irregular, proliferación de microbasurales y la ausencia de campañas de descacharrado, en una ciudad declarada como zona endémica de dengue.

“Ya ni siquiera funciona la línea 0800 para sacar ramas o cacharros. Al principio la excusa era la falta de camiones. Luego vemos que se alquilan, pero no están”, sostuvo.

Falta de diálogo institucional y debilitamiento del control

Según Romero, el Ejecutivo municipal no mantiene diálogo con el Concejo y avanzó incluso sobre su personal: “En un episodio grave, el intendente dio de baja el pase a planta de empleados del Concejo. Muchos aún siguen en litigio judicial. Esto afecta directamente las tareas de contralor que debían hacer”, denunció.

También apuntó contra la falta de transparencia y la resistencia a los pedidos de informe: “El oficialismo no aprueba informes, no colabora con el acceso a datos y además baja la periodicidad de publicaciones del Boletín Oficial. Todo eso debilita la función de control”.

Romero mencionó que el municipio sigue cobrando tasas específicas, pero luego no utiliza esos recursos en los servicios correspondientes.

“Se recauda para arreglos de calles, pero lo hace la provincia. Lo mismo con el alumbrado: el dinero se cobra en la boleta de SECHEEP, pero el municipio ni siquiera puede hacer reclamos porque se lo transfirió a la provincia”, relató.

Denuncias administrativas y pedidos de información

“Esperamos que los organismos de control actúen. No queremos escándalos penales después; queremos que se corrija en la gestión, si es que hay voluntad de hacerlo”, enfatizó Romero.

Finalmente, recordó que toda la información está disponible públicamente: “Los cuadros con montos, licitaciones y comparativas están cargados en la página del concejal Fabricio Bolatti: fabriciob.ar y en sus redes sociales”.

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