David Luna presenta "Algo estaba cambiando para siempre" en la FIL 2024: “En Resistencia tenemos un universo literario muy groso"

David dijo que “Algo estaba cambiando para siempre” es su primer libro con aspecto literario. Se trata de crónicas noveladas, una especie de género no ficción donde el autor incorporó la investigación vinculada al proceso de despojo rural de personas, grupos y familias que, por el cambio de modelo productivo en el país y en el mundo, tuvieron que irse del campo y dejar sus producciones. En ese contexto, estuvo investigando el tema y fue recopilando muchas historias, inclusive la suya.

“Fui construyendo una panorámica sobre ese proceso propio de Chaco de gente que conozco que hizo micromigraciones, que generalmente no son las más conocidas, pero nuestra sociedad está conformada por muchas de ellas. Son historias que me conmovieron siempre, porque se trata de formas sutiles de despojo rural, no tan circunscriptas a la imagen más general que tenemos. Son adaptaciones para sobrevivir o vivir mejor, por las que la gente va haciendo lo que puede en ese proceso. Eso es lo que está cambiando para siempre”, describió David.   

“Las migraciones son mudanzas de cercanía, tienen eso de que la magnitud de los cambios es invisible; que, si bien hay algo del mundo propio que de cierta manera tiene una continuidad, las nuevas formas de vida son trascendentales”, agregó.  

Son 12 crónicas llenas de personajes locales que pasan por la experiencia de mudanza, lo cual casi siempre implica vivencias dolorosas, traumáticas y a la intemperie, que para muchos son un flagelo. David indicó que le parecía interesante captar esas memorias que fue juntando, de una manera un poco más poética y ficcional.  

“Escribo hace mucho tiempo, pero soy más un escriba académico”, manifestó. “En los últimos años, a partir de la beca del Fondo Nacional de Artes me postulé para armar algo de estas características. Me parece que es una herramienta muy poderosa porque implica apoyo y legitimidad de alguien que te dice que tu proyecto está bueno. Después lo compartí con la editorial Contexto, lo leyeron y dijeron ‘vamos para adelante’”.

El escritor resaltó el trabajo de la editorial, calificándolo como “increíble”, tanto de parte de los diseñadores como de los editores, ya que todo el proceso tiene mucho cuidado y generan una experiencia de comunicación que es muy agradable. “Esto permite darse cuenta de que el libro nunca es una experiencia solitaria y necesita de la voluntad y creatividad de mucha gente”.

“En Resistencia tenemos un universo literario muy groso, hay algo que está naciendo, y, en esta época de tantas pantallas hay que ir a contracorriente”, finalizó.  

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