Ricardo Rajoy cumple 60 años de servicio al cliente: "Tengo la fortuna de tener el cariño de la gente"

“Empecé a los 12 años” recordó Ricardo, “el que era el dueño en ese momento, el fundador de la Casa, me llamó para que acuda a empezar a trabajar. Yo no tenía ni idea de que el primero de mayo era feriado, entonces a las siete y media de la mañana me presente en el negocio esperando a que abriera, hasta que un señor salió y me dijo que no iban a abrir. Mis ansias de trabajar eran tales que quise iniciarme el primero de mayo”.

“La primera vez que vine, que fue al día siguiente, estaban solamente un gerente y un vendedor, yo entré de cadete así que ellos me indican lo que tenía que hacer, que era limpiar el piso, la vereda y barrer la alfombra, todos los días tenía que entrar y hacer lo mismo. Yo ya sabía cuál era mi rutina, con la escoba y el lampazo para cumplir con mis funciones” rememoró.

“Ese trabajo lo hice hasta los 14, casi 15 años, a partir de ahí ya me iban enseñando para que aprenda a vender, así que pude empezar a atender a la gente. Fueron transcurriendo los años sin darme cuenta, algunos más buenos y otros más difíciles, pero siempre con el acompañamiento de la empresa que me apoyó en todo momento, haciendo mi camino hasta lo que llegué hoy”.

¿Cómo se adaptan los vendedores y los comercios a los nuevos tiempos?

“El correr de los años te va enseñando cómo captar lo que el cliente está necesitando, si bien la tienda virtual es buena, para mí la presencialidad sigue siendo la mejor opción, porque uno puede brindar una amplia gama de productos. A veces los clientes vienen con una idea y en base a eso se le ofrece otras opciones, el objetivo es complacerlos”.

¿Cómo trabajan en contexto con la situación económica actual?

“Como en todos los rubros la cosa no está nada fácil, pero hay que remarla” respondió, “se ofrecen incentivos con promociones, porque el cliente está un poco duro a la hora de gastar, a nadie le alcanza el dinero y están muy medidos en ese sentido. La casa se esmera en ofrecer productos que sean de buena utilidad y puedan darle buen resultado. Quizás antes podían comprar dos pares, y ahora tienen que satisfacer sus necesidades con uno solo, eso es lo que queremos ofrecer y lograr que gasten lo menos posible”.

“Tengo la fortuna de tener la inclinación y cariño de la gente, pienso que es por mi forma de ser y por el tipo de persona que soy, yo me valgo a ellos, y, por otro lado, trato de brindarles lo mejor para que sean bienvenidos en el lugar que vayan. Yo siempre digo que tienen que lucir bien, porque si alguien les pregunta por un zapato que les queda lindo tienen que decir que los atendí yo" dijo, entre risas. "Es lo que me caracterizó siempre, ser sincero con la gente, no por el hecho de vender voy a darles algo que les quede mal o grande” aseguró Ricardo