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Club Social
“Tratamos de brindar el mejor servicio posible, sabiendo que hay muchas familias detrás que dependen de esto”, aseguró Sartore en diálogo con nuestro medio.
Caída en la demanda y competencia desigual
Consultado sobre el panorama actual del sector, Sartore fue claro: “La demanda del transporte viene en constante decadencia. El colectivo ha sido desplazado por servicios alternativos puerta a puerta, que complican bastante. A eso se suman los aumentos constantes en los costos”.
El empresario advirtió que el uso del colectivo tradicional disminuyó notablemente. Según explicó, aunque los pasajeros pueden consultar el recorrido en tiempo real gracias a la plataforma SITAM, la falta de comodidad y la incertidumbre en horarios empujan a muchos usuarios hacia opciones más directas y privadas.
Fin de los subsidios nacionales para el interior
Uno de los factores más determinantes, según Sartore, fue la eliminación de los subsidios por parte del Gobierno nacional.
“Las empresas del área metropolitana, como en Buenos Aires, siguen recibiendo subsidios. Pero al interior se le quitó todo. Fue una decisión del Ejecutivo nacional de no aportar más”, señaló.
Esto dejó a las empresas como San Fernando Urbano dependiendo únicamente de la recaudación diaria: “Defendemos como gato panza arriba. Con lo poco que entra del pasaje tenemos que afrontar todo: salarios, combustible, repuestos, cuotas de coches. Es muy difícil sostenerlo así”.
Diálogo con los trabajadores
En cuanto al vínculo con el personal, Sartore valoró el entendimiento y el esfuerzo compartido: “Mi viejo solía decir que el chofer es un socio oculto. Ellos están arriba del colectivo, ven cómo está la calle, cómo baja el pasaje. Nos acompañan porque saben cómo estamos”.
Este mes, detalló que el 50% del salario fue abonado, y que antes del día 10 esperan completar el pago.
“Por supuesto que no es nuestra intención pagar en cuotas. Es engorroso para todos. Pero no tenemos la holgura financiera. Incluso este fin de semana que se viene baja mucho la recaudación”, explicó.
Destacó también que, pese a que se barajó una medida de fuerza, los trabajadores decidieron levantarla entendiendo la situación de la empresa: “Un día parado es pérdida total. El chofer debe cobrar igual, los compromisos siguen existiendo, y no entra un peso”.
“Por suerte, los muchachos nos dan una mano. Dicen: ‘hasta acá esperamos’, ‘hasta acá llegamos’, ‘podemos acompañarlos’. Eso nos permite seguir funcionando”.
Mirá la entrevista completa.
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