“Hay una urgencia de que la seguridad vial sea política de Estado”: el reclamo que dejó el Congreso Nacional en San Juan

El cuarto Congreso Nacional de Seguridad Vial se desarrolló en San Juan con la participación de representantes de todo el país. Entre ellos, estuvo Karina Winckler, referente chaqueña de la Red Federal de Familiares y Víctimas Viales, quien destacó en diálogo la necesidad urgente de que la seguridad vial se convierta en una verdadera política de Estado.

“En cada provincia vemos que la seguridad vial no se trata con la seriedad que requiere. Faltan políticas públicas, actualizaciones legislativas y un enfoque integral que incluya salud, educación y prevención”, señaló Winckler.

El encuentro reunió a profesionales, familiares de víctimas, especialistas y ciudadanos comprometidos con una problemática que se cobra miles de vidas por año. Uno de los puntos destacados fue el segundo hackathon nacional sobre seguridad vial, en el que la chaqueña fue convocada a la mesa de salud mental. Allí, se evidenció una de las grandes fallas: “La siniestralidad vial no está abordada desde el sistema de salud, ni siquiera desde la salud mental, y mucho menos desde la educación”, lamentó.

Además, denunció la falta de contención a las víctimas —o damnificados, como son nombrados desde el área de salud mental— y criticó la ausencia de un abordaje interinstitucional coordinado. “En cada siniestro, por mínimo que sea, intervienen salud, policía, justicia, bomberos… pero nadie se detiene a pensar en el costo emocional, social y económico que eso implica para el Estado y la ciudadanía”, sostuvo.

Uno de los temas centrales fue también el impacto del comportamiento humano en los siniestros. “El 82% de los accidentes viales tienen como causa al factor humano”, recordó Winckler. “Por eso necesitamos educación, prevención, sanción y conciencia social”.

En cuanto a la polémica por la implementación de radares en el Chaco, fue clara: “Es cierto que se recaudan fondos, pero el objetivo principal debe ser salvar vidas. El problema no son los radares, sino cómo se comunican e implementan”.

La referente también remarcó que en la provincia aún no existe un observatorio vial: “Es increíble que con los niveles de siniestralidad que tenemos, todavía no contemos con uno. Un observatorio nos permitiría conocer quiénes son las víctimas, por qué ocurren los accidentes y qué podemos hacer para prevenirlos”.

Según los datos compartidos, el 72% de las víctimas viales en moto son hombres de entre 15 y 37 años, pero también se incrementaron las muertes de mujeres involucradas como pasajeras o conductoras. Winckler llamó a “revisar por qué la moto sigue siendo el transporte más elegido en Chaco, qué pasa con el transporte público, con la infraestructura, y con las decisiones que toma el Estado”.

En cuanto al rol de la ciudadanía, fue contundente: “Tenemos que dejar de pensar que a nosotros no nos va a pasar. Hay que exigir a nuestros representantes que incorporen la seguridad vial a sus agendas. En los debates políticos, nunca se habla del tema y eso es preocupante”.

Finalmente, sobre los pasos a seguir luego del Congreso, explicó que cada delegación provincial llevará las conclusiones a sus autoridades. “Algunas provincias ya avanzaron en la creación de oficinas de atención a víctimas, como indica la ley. En Chaco seguimos esperando. Queríamos traer la buena noticia de que el próximo Congreso sería en nuestra provincia, pero aún no lo conseguimos. Ojalá pronto lo logremos”.

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