Toma de rehenes y robo de $80 millones: las víctimas pudieron denunciar tres días después

Un brutal asalto ocurrió este sábado, cerca de las 17.30 horas, en una estancia ubicada en Colonia Pastoril, jurisdicción de Capitán Solari, donde al menos dos hombres armados irrumpieron en la propiedad rural y redujeron violentamente a sus ocupantes: una mujer de 82 años, su hermano de 73 y una tercera familiar de 68 años.

Los delincuentes, armados y con actitud intimidante, no solo sustrajeron una suma millonaria de 80 millones de pesos, dos escopetas y todos los celulares de las víctimas, sino que además los golpearon y los encerraron, prohibiéndoles salir del domicilio bajo amenaza. Según el relato de una de las damnificadas, los delincuentes huyeron a pie del lugar.

Recién a los tres días, la mujer mayor logró llegar hasta la ciudad de General San Martín para radicar la denuncia, dando inicio a una investigación que movilizó a la Fiscalía de Investigaciones Rurales a cargo de Noelia Miño, junto a Criminalística, Investigaciones Complejas y personal de la zona interior.

Durante el operativo en el campo, los peritos secuestraron tres cajas de cartón, una valija negra (donde habría estado el dinero robado) y las prendas ensangrentadas del hombre de 73 años. Además, en el camino interno del predio, encontraron una alpargata, un palo de escoba y una pieza plástica similar a una empuñadura de arma de fuego, todos elementos que fueron incautados por su posible vinculación con el hecho.

Horas después, un peón rural, oriundo de General San Martín, se presentó ante los investigadores advirtiendo que había cartuchos de arma de fuego en el campo. Al regresar al sitio indicado, el personal halló seis cartuchos calibre 32, dos de ellos percutados. Llamativamente, estos no habían sido observados en la inspección anterior, por lo que la fiscal ordenó la conducción del peón a la comisaría para ampliar las averiguaciones.

La tensión creció cuando el empleador del peón, intentó impedir su traslado e incluso agredió al subcomisario, por lo que fue reducido y posteriormente trasladado al hospital local y a la comisaría, quedando a disposición de la Justicia.

Los damnificados formalizaron denuncias y declaraciones judiciales, y la causa avanza bajo la supervisión de altas autoridades policiales de la región, mientras los investigadores buscan identificar y detener a los autores materiales del millonario y violento golpe.